La construcción industrializada es una realidad cada vez más asentada que implica múltiples ventajas y beneficios. En los próximos años se prevé que crezca de forma destacada en España, aunque ya son muchas las promotoras inmobiliarias que apuestan hoy por este modelo constructivo.
Los expertos están de acuerdo en que su peso será cada vez mayor, principalmente dentro del sector residencial, ya que representa un gran avance debido a que reduce los plazos de entrega a la mitad y conlleva mejor calidad en la ejecución y alta precisión en los acabados. Además de que contribuye a minimizar el impacto medioambiental.
También es importante destacar que esta nueva forma de construir viviendas reduce las reclamaciones en el periodo de postventa, los fallos de montaje y los accidentes laborales.
Aunque en nuestro país, de momento, la construcción industrializada representa aproximadamente un 1% del sector, se espera que en los próximos años el porcentaje se acerque al de otros países europeos, como Reino Unido donde representa el 7% o Alemania, con cerca del 9%. De hecho, se estima que en 2030 supondrá ya el 40% de los nuevos proyectos.
En Cidark apostamos por la industrialización como el futuro de la construcción y, como nosotros, cada vez son más las empresas constructoras y promotoras que apuestan por la innovación y la aplicación de procesos industriales en la construcción. La construcción industrializada cubre las cada vez más altas expectativas a nivel de sostenibilidad, tecnología, funcionalidad y flexibilidad.
Según el Instituto de Estudios Económicos, la construcción será la actividad económica que liderará el crecimiento en España en los próximos años y una tendencia importante es el aumento de los proyectos dirigidos a mitigar el cambio climático. De hecho, cada vez aparecen más concursos públicos en los que se premia el uso de la construcción industrializada dada su contribución a la reducción de las emisiones de CO2.
En plena adaptación al cumplimiento de los criterios de sostenibilidad es fundamental un cambio en el sector hacia una industria 4.0, con empresas altamente competitivas y tecnológicas. En esta transformación, la industrialización se conforma como el motor de cambio, capaz de generar empleo de calidad y de potenciar una economía empresarial colaborativa.
También cabe destacar que la construcción industrializada se ha consolidado como solución para uno de los grandes problemas del sector: la falta de mano de obra cualificada. La industrialización crea empleo atractivo en el sector y atrae a jóvenes y a mujeres a un sector que tradicionalmente ha sido poco interesante para ellos.